MANTA: RECUERDOS DE TRANQUILIDAD

Desde hace muchos años Manta ha ido avanzando; pero si retrocedemos el tiempo y la historia podemos ver a una ciudad no tan actualizada como la de hoy, pero si un poco más tranquila; donde se podía caminar sin mirar atrás, sin sobresalto y sin miedo de lo que pudiera parar.

Manta en la actualidad se ha ido regenerando y nosotros los mantenses, podríamos sentirnos orgullosos de estar en esta ciudad donde cada día avanza, tanto en personas como en  infraestructura, pero al parecer  las cosas no son así; la delincuencia se pronuncia cada día más fuerte y pensamos que nada se puede hacer.

 

¿Y, que estamos haciendo los jóvenes en esta cuidad? donde parecería que no hubiera justicia. Donde inocentes pagan la culpa de los que verdaderamente la tienen, donde muere mucha gente casi todos los días, y miramos solo los periódicos, vemos las noticias y a veces ni el corazón se nos comprime, creo que debemos comenzar a cambiar nuestra manera de pensar y ponernos un poco en la piel de las otras personas, que es  solo cuando te pasa a ti que te puedes dar cuenta cuan grande es ese dolor de aquellas personas que pierden a sus seres queridos y muchas veces sin saber porque…

 

Para que esta ciudad tan bella ya no sea el hazme reír de los demás, donde cualquier cosa puede pasar, que las personas nos puedan visitar y no tengan miedo de pisar esta tierra tan maravillosa que Dios nos dio, pensemos que si tuviéramos un poco de su corazón, las cosas fueran distintas; el en su gran misericordia nos dio a su hijo para que pudiéramos ser salvos, pero al parecer a las personas eso se les ha olvidado y se toman la justicia por sus propias manos, ¿Por qué no dejamos que Dios pueda juzgar a aquellos que no hacen bien las cosas.

 

¿Cuál es el futuro que queremos para nuestros hijos? Uno lleno de sangre y delincuencia u otro de paz, solo tendríamos una ciudad tranquila si los padres ayudan a crear conciencia a los hijos; de ser buenos ciudadanos encaminándolos a tener una vida de acuerdo a los estatutos bíblicos.

Y nosotros los jóvenes a trabajar para que otros sean mejores, creamos  que podemos y unámonos no importa en que condición nos encontremos, solo creamos en una ciudad mejor y la vamos a tener.

 

2 crónicas 7:14-15

 

Por Manuelli Rodríguez Palma.